La semana antes de Año Nuevo (2017), podrías encontrarme durmiendo en casi todas partes, en cualquier momento. Toda mi familia se preguntaba qué estaba pasando. ¿Por qué no podía quedarme despierta? La teoría inmediata de mi prima era que estaba embarazada, pero juré que no. No es que me opusiera a estar embarazada, simplemente no me sentía embarazada de ninguna manera, ni siquiera tenía ninguno de los síntomas. Aún así, no podía explicar el intenso cansancio y tampoco estaba tratando de no tener un bebé. Mi prima se me había metido en la cabeza. Entonces, la semana anterior, le confié a mi hermana que quería hacerme una prueba de embarazo y ella me cubrió para que lo hiciera mientras visitaba a mi mamá. Al final, esa prueba dio negativo. Sin embargo, no podía dejar de pensar ¿y si, si?
Avance hasta el jueves antes del año nuevo. Todavía me sentía tan cansada y poco convencida por la primera prueba que me dirigí a la farmacia más cercana y compré una nueva prueba de embarazo. Me fui a casa e inmediatamente al baño. Mi esposo estaba en el trabajo y yo estaba demasiado ansiosa como para esperar, además, todo seguía siendo un “tal vez”. Dos minutos después de orinar en el examen, ahí estaban, dos líneas gruesas. Me quedé sin palabras, realmente no sabía qué pensar. Estaba emocionada pero nervioso y, sinceramente, solo en estado de shock.
El primero en enterarse fue nuestro gato. Abrí la puerta del baño y él estaba sentado allí mirándome, a su manera burlona y arrogante. Recuerdo que lo agarré y le dije en voz alta: "¡Está bien, vas a ser un hermano mayor!". Decir esas palabras en voz alta lo hizo más real y mucho más estresante.
Mi esposo no estaría en casa por varias horas más y sabía que quería decírselo esa noche, pero no sabía cómo. Solo sabía que no quería que fuera extraño o cursi. Así que fui a la tienda más cercana para ver si podía encontrar algo único y lindo para contarle la gran noticia. Si me conoces, sabrás que odio ir de compras porque soy muy indecisa. ¿Cómo se suponía que iba a elegir algo pequeño para revelar algo tan grande? Entonces, lo mantuve simple y elegí un par de zapatos de bebé unisex. Cuando llegué a casa, los zapatos se sentían completamente decepcionantes. Quería algo más personal e íntimo para nosotros. Así que me sumergí en mi lado artístico y dibujé un par de fotos para combinar con los zapatos. Mi esposo es un gran fanático de Marvel y dos de sus superhéroes favoritos son Hope Summers y el Capitán América. Así que dibujé cada uno de esos personajes con un signo de interrogación entre ellos.
Cuando mi esposo llegó a casa, traté de actuar con calma y serenidad. Le di tiempo para que se acomodara y se sintiera cómodo. Después, le pedí que subiera porque tenía algo para él. Le di el primer dibujo que hice y luego el segundo. Usé las fotos como pistas antes de darle los zapatos. Él, como yo, estaba en shock. Dijo “¿En serio?” Y le dije si! Este fue el momento que cambió nuestras vidas. Fue entonces cuando nos dimos cuenta de que íbamos a ser padres.
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